Cuaderno de bitácora

Martes 12 de febrero de 2019. 10:00 h. César Sánchez, Cristina Cañamares y Arantxa Sanz acompañados de Ana Rosa Bodoque ponen rumbo a Cañete. Allí los esperan dos informantes mujeres con muchas ganas de recitar todo tipo de retahílas.

Una vez allí, Luisa (hija y sobrina de las informantes) les ofrece un refrigerio de cortesía mientras charlan animadamente de diversas cosas relacionadas con el pueblo. Les cuenta también que su madre y su tía se han levantado hoy especialmente agitadas debido a la visita que sabían que iban a recibir.

En torno a las 12 h llega la hora de visitar a las informantes, Luisa y Margarita, de 101 y 97 años respectivamente. Nada más traspasar el umbral de la puerta los ladridos de dos perritos les dan la bienvenida. En seguida salen también a recibirlos Luisa y Margarita que, desde el primer minuto, solo tienen palabras de agradecimiento. Cámara en trípode y grabadora en mano, César, Arantxa y Cristina recogen todas las poesías, refranes, adivinanzas y pericias vitales que, con mucha emoción y entusiasmo, recitan las informantes. En varias ocasiones se disculpan por no recordar en ese preciso momento más composiciones, para ellos son más que suficientes, verdadera música para los oídos y un patrimonio que merece la pena registrar antes de se diluya en la vorágine del tiempo.

Tras una hora y media de trabajo de campo, los investigadores se despiden de las informantes. Ha sido un rato increíble. Vuelven a casa con las tarjetas de memoria repletas de registros sonoros y audiovisuales. Saben que allá donde el folclore los lleve,  irán para registrarlo.